El tratamiento cerámico crea una barrera protectora de una dureza 9H en la escala de Mohs, lo que significa que está a tan sólo un nivel por debajo de la dureza del diamante. 

Aunque hay que tener cuidado porque este tratamiento no es indestructible. A pesar de su dureza, la capa que crea encima de la pintura es muy fina y puede ser traspasada por microimpactos como los que pueden ocasionar las piedras en la carretera.

Si necesitas una protección contra microimpactos, te recomiendo que nos preguntes por la protección con PPF (Paint Protection Film) para tu vehículo.

Normalmente tardamos 3 días aproximadamente en realizar este trabajo, aunque el tiempo puede variar dependiendo del estado de la carrocería con la que llegue el coche y el tamaño del mismo.

No. En caso de que tu coche sea nuevo, a nosotros nos facilita un poco más el trabajo, aunque debemos pulirlo igualmente para dejar la carrocería en el estado más puro posible y con el máximo brillo antes de la aplicación del cerámico. Además debemos prepararla químicamente para la aplicación del tratamiento. De todas formas gozarás en este caso de una bonificación del 10% de descuento.

Hablando correctamente no necesita ningún mantenimiento especial, pero sí un "trato" o "cuidado" especial. Lo que quiere decir que es conveniente que se lave el coche periódicamente, que se le aplique un spray hecho a base de dióxido de silicio (Si02) cada vez que lo lavamos y tratar de cuidar en general el coche.

El tratamiento cerámico no es un tratamiento pensado para resistir un trato "rudo", sino que está pensado para ayudarte a mantenerlo limpio por más tiempo, para ayudarte también durante el proceso de limpieza y como protección general ante los contaminantes más comunes del día a día. Además de otros beneficios como la protección contra rayos UV y el profundo brillo que otorga.

No te preocupes por esto, ya que cuando traigas tu coche para realizar este tratamiento te asesoraremos sobre todo lo que necesitas saber para el correcto cuidado de este tratamiento.